El Garbanzo

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Origen

Se remonta al 9500-9000 a. C. entre Siria y Turquía. Desde ahí, se expandió a Persia, India y Asia central. Los fenicios extendieron su cultivo y consumo por todo el mar Mediterráneo. En México se empezó a consumir tras la llegada de los españoles.

Cultivo

Se trata de un plantío de bajo requerimiento de agua, aunque algunos riesgos estratégicos durante su desarrollo pueden ayudar a incrementar sus rendimientos. Como lo conocemos y consumimos es la semilla de la planta del garbanzo (Cicer arietinum), herbácea de la familia de las leguminosas de periodicidad anual.

Alimentación

Aporta proteína vegetal, fibra, niacina, vitaminas A, B1, B6, C, D, E y K, antioxidantes y carbohidratos. Además, es una fuente de calcio, hierro, fósforo, magnesio, manganeso, potasio y zinc. El almidón que contiene brinda calorías disponibles por varias horas debido a su lenta absorción. Esto es bueno para personas con diabetes ya que las ayuda a mantener los niveles adecuados de azúcar en la sangre. El garbanzo mexicano tiene excelente aceptación en los mercados internacionales.

Cosecha

 En México, la mayor disponibilidad de garbanzo es entre marzo y junio. Su cosecha asciende a 13 millones 741 mil toneladas anualmente, de las cuales, 2 millones 466 mil son para exportación, lo que representa una derrama económica de 2 mil 36 mdd al año. Sinaloa y Sonora son las principales entidades productoras de este alimento.

Referencias

PROFECO. (Abril de 2020). ¡A comer garbanzo!, Revista del consumidor (518), 8-9. Obtenido de https://issuu.com/profeco/docs/revistadelconsumidorabril2020