Carne de Conejo: Alternativa Productiva para el Trópico

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Por Dr. Luis Eliezer Cruz Bacab / División Académica de Ciencias Agropecuarias - Universidad Juárez Autónoma de Tabasco. Tabasco, México.

Las necesidades de proteína de origen animal para la población humana, ha generado interés creciente en el estudio de fuentes de alimentos alternativas, baratas y de gran calidad nutricional. En este sentido, el conejo doméstico Oryctolagus cuniculus es reconocido ampliamente por su alta velocidad de crecimiento y capacidad reproductiva, mismas que lo hacen atractivo y viable para la producción de carne. Existen alrededor de 47 diferentes razas de conejos en el mundo, sin embargo, las razas que se emplean para la producción cárnica se clasifican como razas medianas o de formato mediano, las cuales llegan a tener pesos adultos entre los 3 – 5 kg de peso. La raza nueva Zelanda blanco es la más empleada a nivel mundial para la producción cárnica, seguida de la raza California, Chinchilla, Mariposa, entre otras.  

En cuanto a su alimentación el conejo es herbívoro, el cual es capaz de consumir y aprovechar de forma eficiente altas cantidades de fibra presentes en forraje fresco o heno. Una de las características más sobresalientes de la fisiología digestiva del conejo es la cecotrofía, la cual consiste en el consumo de cecotrofos, los cuales son un material que ha sido seleccionado directamente en el ciego, para ser ingerido nuevamente y así poder obtener el máximo beneficio de los forrajes. En las zonas tropicales todo el mundo, como lo es el sureste mexicano, se han identificado una amplia variedad de especies vegetales con potencial para la alimentación de herbívoros como el conejo, considerando su disponibilidad, producción de biomasa y composición química, demostrando que la inclusión de forrajes tropicales en la alimentación de conejos de engorde permite obtener rendimientos productivos satisfactorios tanto en cantidad como en calidad nutricional.  Adicionalmente, esta especie posee características morfológicas que le brindan ventajas para la producción de carne sin la necesidad de grandes superficies de tierra; Dentro de las características más destacadas del conejo como animal de producción cárnica se encuentran:

* Poca demanda de espacio para el desarrollo de la producción *Madurez sexual temprana (4 meses de edad en machos y hembras) *Alta capacidad reproductiva (hasta 8 partos por hembra por año) * Elevado número de crías por parto (6 hasta 12 gazapos por camada) * Gran velocidad de crecimiento (alcanzan 2 kg de peso en 2 meses) * Alto rendimiento en canal 50 – 54 % * Alta capacidad para el aprovechamiento de forrajes en su alimentación, disminuyendo los costos de producción. * Alto contenido de proteína en la carne 20 – 22 % * Bajo contenido de grasa en la carne menos del 8 % * Alta concentración de ácidos grasos omega.

En cuanto a la producción de carne, el conejo a nivel comercial es sacrificado para la obtención de carne entre los 2 – 2.5 kg de peso vivo con una edad aproximada de 3 meses dependiendo el manejo de su alimentación. Una de las principales características en la calidad de la carne del conejo es su alto contenido de proteína que oscila entre 20 – 22 %, bajo contenido de grasa menor al 8 %.

 En comparación con otras carnes, la carne de conejo pose una alta digestibilidad y es posible prepararla en una gran variedad de platillos. Se ha demostrado que la carne de conejo es una excelente opción para personas con enfermedades crónico degenerativas como la diabetes, hipertensión, intolerancias alimentarias, niños y adultos mayores. Por las características antes descritas la carne de conejo es una alternativa ideal para su inclusión en nuestra alimentación habitual.

 

Referencia: Edición No. 116 revista impresa Agro Región (noviembre-diciembre 2022)