Ganaderos advierten sobre debacle sanitaria por apertura de importaciones de cárnicos.

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Las abruptas aperturas a las importaciones de productos cárnicos de países que no alcanzan las mismas condiciones zoosanitarias de México; el cambio climático y sus sequías recurrentes; el incremento desmedido en el precio de los granos y el riesgo sanitario por brotes en el mundo de gripe aviar, fiebre porcina africana, aftosa y de las vacas locas, amenazan a la ganadería nacional. Inquieta una posible debacle sanitaria.

Así lo denunció el presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), Homero García de la Llata, ante el titular de Agricultura, Víctor Villalobos, al hacer pública la preocupación de pequeños y medianos ganaderos que representan 1.5 millones de unidades de producción pecuaria (UPP) en todo el país.

Afirmó que la producción pecuaria: carne, leche, pollo, huevo, con valor superior a los 750 mil millones de pesos, satisface la demanda de más de un 80% de la proteína animal que México consume. Y se atiende la exportación de 350 mil toneladas de carne y de un millón de becerros en pie al mercado internacional.

En cuanto a la contención de precios, obligada misión del gobierno federal sugirió “empezar aquí y moderar los excesivos márgenes en la venta al consumidor final”.

Dejó en claro que en la producción de alimentos en México existen dos escenarios diferentes: la industria cárnica y láctea con grandes alcances tecnológicos sanitarios y de inocuidad, con capacidad exportadora.

Por el otro, los miles de productores primarios, 85% pequeños y medianos, base de la pirámide de los sistemas-producto de bovinos de carne y leche, que son el sostén principal del éxito del sector pecuario del país.

Pero, subrayó, “son a la vez el eslabón más débil. En muchísimos casos sin tecnología, sin financiamiento ni apoyos y a merced de los intermediarios y la inseguridad”.

Enfatizó que “esta enorme base social, como lo ha sido siempre es la más afectada en caso de pérdidas de estatus zoosanitario, por el impacto inmediato a la baja del precio de sus productos.

A los titulares de Agricultura y de Economía, Víctor Villalobos y Raquel Buenrostro, respectivamente, les dijo: “Confiamos plenamente en que nuestras autoridades resguardarán esa gran fortaleza que es sin duda la sanidad animal en México y no permitirán competencias desleales ni del norte ni del sur que perjudiquen a miles de pequeños ganaderos del país”.

Pidió a las autoridades los escuchen y expliquen. “Y vamos juntos en la toma de estas trascendentales decisiones para el futuro de la ganadería mexicana. Los ganaderos no vamos a fallarle ni al gobierno ni el pueblo”.

También apuntó que “no nos amedrenta la competencia como lo demostramos desde hace casi 30 años al seno del Tratado de Libre Comercio con Norteamérica. Lo que nos inquieta es una posible debacle sanitaria”.

GANADERIA FUENTE DE EMPLEO

En este marco, el secretario de Agricultura, dijo que con una aportación al Producto Interno Bruto (PIB) de 39.7% del sector primario, la ganadería en el país es una esencial generadora de empleo, fuente de alimentación y aliada en la lucha contra la desnutrición.

Recordó que México es un país con vocación ganadera, donde el 56% del territorio nacional se dedica a esta actividad, esto es en 108.9 millones de hectáreas se tienen diferentes sistemas de producción de cárnicos y lácteos.

En este evento, el titular de Agricultura fungió como testigo de honor en la firma del Convenio de Vinculación Pecuaria entre la Confederación Nacional de Organizaciones Ganadera (CNOG), la Asociación Mexicana de Productores de Carne (AMEG) y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El objetivo es aumentar la productividad, competitividad, mejorar la trazabilidad y sustentabilidad a través de la investigación, la academia y las cadenas productivas.

Signaron este compromiso el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers y el presidente de la CNOG, Homero García de la Llata.

FUENTE: El Sol de México