Cuidando la salud de la yegua gestante y el nacimiento de un nuevo potro.

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Por Juan José Saiz Zarzal

División Academica de Ciencias Agropecuarias/UJAT

Agro Región

Tratándose de una yegua gestante nunca pensamos de una situación delicada, esto es debido a que sabemos menos de los caballos que de otros animales domésticos.

Sin embargo en un ambiente natural las yeguas son buenas reproductoras, pero si las manejamos inapropiadamente puede existir una deficiencia reproductiva; afortunadamente podemos tomar el control en el manejo adecuado.

COMIENZO DELICADO

Los primeros días de la existencia del embrión son los más delicados debido a que durante los primeros 30 días puede ser reabsorbido entre un 10 a 15 por ciento. El estrés, enfermedades, infecciones uterinas, alteraciones hormonales y la presencia de gemelos implica una perdida temprana. La causa no ha sido determinada.

Cuando la yegua concibe, el huevo fertilizado (Cigoto) viaja a través de las trompas de Falopio, y entra en el útero, alrededor de los días 6 y 7 emigra a través del útero donde se empieza a adherirse en los días 16 y 17.

Por el día 12 y 13 la vesícula embrionaria se puede detectar por medio de un examen con el ultrasonido. Por razones prácticas, algunos criadores tisean a la hembra, esto quiere decir que ponen a la yegua con un caballo recelador para ver si no repite calor 14 a 20 días después de la última fecha de monta.

Si esto no sucede la preñez y los latidos car discos se pueden detectar con el ultrasonido. La palpación rectal, el revelador y el ultrasonido no afectan el embarazo.

La palpación rectal se puede hacerse desde los 30 a los 35 días después de la monta del semental, por un médico experto para confirmar la gestación.

Ahora, el examen con ultrasonido a los 14 a los 16 días pos ovulación confirma la gestación y detecta la presencia de gemelos. La confirmación se puede hacer a entre los 45 a 90 días pos ovulación debido a que este es el tiempo de mayores reabsorciones.

Una hembra confirmada de gestación por ultrasonografía entre los 14 a 30 días, no debe estar forzosamente preñada diez meses después. La habilidad de su yegua para mantener la gestación necesita ser confirmada en los primeros 90 días por el veterinario.

PROBLEMAS CON LOS GEMELOS.

Algunos especialistas recomiendan el examen de ultrasonido entre los 14 a los 16 días pos ovulación para detectar gemelos y así tener la oportunidad de eliminar un embrión para que el otro se desarrolle normalmente. Esto se hace para evitar el riesgo que representan los gemelos. En un 95 por ciento en las hembras con gemelos uno o ambos embriones son reabsorvidos o abortados en los primeros 60 días; el esperar que esto ocurra de manera natural puede retardar o interferir con la siguiente gestación.

En un pequeño porcentaje los gemelos sobre viven en el útero más de 50 días y es raro que los productos lleguen a nacer. En caso de sobre vivir estos nacerán pequeños y débiles. Muchos de los gemelos que pasan de los 50 días son abortados espontáneamente a los 6 u 8 meses.

Las hembras que tienen gemelos; tienen par tos prematuros de 300 a 320 días y las crías prematuras tienen serios problemas para poder sobrevivir. Siguiendo el curso de la naturaleza un buen manejo es lo mejor para ayudar a la yegua en sus primeros 30 a 60 días de gestación.

La yegua debe llegar a la época de cruza sana y de buen peso. Las hembras delgadas tienen más problemas para concebir que las que estén en su peso.

Evite estresar a la madre lo menos posible; el estrés puede bajar la progesterona, que es la hormona que mantiene la gestación. Una en enfermedad o fiebre puede ser la causa de que el sistema secrete prostaglandinas que puedan causar el aborto.

UTILIZANDO EL CRITERIO

Transporte su animal solo cuando sea necesario; tenga cuidado cuando exponga su yegua a otros caballos para evitar el riesgo de lastimadas y transmisión de enfermedades aislándola de grandes grupos de caballos.

Déle alimentos y forraje nutritivos, pero evite sobrealimentar. Suplementos con vitaminas y minerales así como una dieta balanceada. También asegúrese de que su yegua tiene todas sus vacunas vigentes, al igual que sus despara citaciones.

Fuente: Revista Agro Región, Julio 2008, Edición 17.