El gogo, una fruta desconocida

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Por Dra. Elisabeth Casanova García y Dr. Jorge Quiroz Valiente / Agro Región
 

Gogo es el nombre local de un árbol de la familia de las Celestraceae, su nombre científico es: Salacia Elliptica. En otros países se puede encontrar este fruto con el nombre de saputá o fruta caramelo; La familia Celastraceae incluye 98 géneros con aproximadamente 1,210 especies. Están muy extendidas en regiones tropicales y subtropicales, incluyendo el norte de África, América del Sur y Asia oriental, particularmente en China. Algunas especies de esta familia se han utilizado en la medicina tradicional, y sus diferentes actividades farmacológicas se han descrito en la literatura.

El género Salacia se encuentra en México y otros países de América del Sur. Se han identificado botánicamente veintiuna especies, incluida S. elliptica. Que es un árbol que se encuentra naturalmente en las regiones selváticas, asociadas al cacao, aunque su origen se atribuye a Brasil y Paraguay. En México se ha reportado sólo en Veracruz y Tabasco.

Es un árbol que alcanza los 12 m de altura y el diámetro del tronco (DAP) es de 40 cm y produce un fruto delicioso, esférico de 5-8 cm de diámetro, dotado de cascara verde amarilla. su pulpa es traslúcida y muy dulce. El árbol es ornamental, dotado de hojas gruesas y perennes, lo que lo hace muy adecuado para el paisajismo.

Hay estudios que muestran que la remoción de pulpa y la escarificación química (ácido clorhídrico) de las semillas tienen efectos positivos sobre la tasa de germinación de las semillas de diferentes especies nativas. También si se siembra por estacas produce enraizamiento. Se investigó la germinación de 450 semillas pertenecientes a 12 especies de plantas y seis especies no germinaron, pero la germinación de semillas de Salacia elliptica fue la mayor.

Las especies de plantas se conservan según el valor de uso y en el traspatio tabasqueño, el gogo tiene una importancia media respecto a las 40 especies identificadas en los traspatios. En cada mercado municipal del estado de Tabasco se encuentran diferentes especies vegetales comestibles y algunas, como el Gogo, están presentes solamente en julio y agosto. Representan una diversidad que puede considerarse el arsenal alimentario del pueblo tabasqueño. La estacionalidad de estas especies es muy marcada. La presencia de esta especie refleja una tradición culinaria establecida en todo el estado. Durante la procesión a la Virgen de la Asunción en Cupilco, es común que como ofrenda, se coloquen en las enramas frutos de gogo, ya que esta celebración coincide con la fecha en que estos árboles están en producción.

Durante los últimos años se han estudiado los constituyentes químicos y hasta el momento se han identificado diferentes constituyentes, principalmente triterpenos pentacíclicos. De acuerdo con los datos reportados, algunos de los presentan actividad farmacológica potencial. En medicina popular se ha utilizado en fiebre, hinchazón, cicatrización de heridas, diabetes y otros tratamientos.

Al monitorear las comunidades, se ha reportado que los árboles frutales de mayor desperdicio de frutos, son los mangos (Mangifera indica) en sus diferentes variedades, seguido de las carambolas (Averrhoa carambola), el nance (Byrsonima crassifolia), los cítricos (Citrus spp), la guayaba (Psidium guajava), el gogo (Salacia elliptica), el icaco (Chrysobalanus icaco), el tamarindo (Tamarindos indica).

El gogo contiene semillas grandes envueltas en una suave pulpa de sabor sutil y dulce, la manera de comerlo es chupando las semillas para extraer la pulpa, que aparte es fresca y de consistencia agradable; también se puede usar para preparar un refresco, añadiendo agua, azúcar y unas gotas de limón.

El trópico ofrece una enorme cantidad de plantas, algunas con frutos que aparte de sus propiedades alimenticias suelen tener propiedades medicinales; son tantas especies vegetales que incluso las personas que habitan el territorio desconocen muchas de ellas. Los árboles dan diversos servicios a la tierra, como alimento, sombra, cerco, belleza del paisaje, oxígeno, hábitat, etc., en este sentido conocer y preservar la biodiversidad es una misión importante de la civilización actual. La conservación de especies se hace más fácil si la especie tiene algún uso de importancia sustantiva, así que conocer y consumir este fruto es el primer paso para conservarlo.