Las serpientes son animales de la familia de los reptiles que presentan unas características físicas muy particulares. Poseen un cuerpo bastante alargado el cual está desprovisto de extremidades y que para desplazarse necesitan reptar con movimientos ondulantes laterales. Su cuerpo está cubierto de escamas y en su interior poseen vértebras. Son animales carnívoros que se alimentan principalmente de la caza de otras especies animales y para ello recurren al mecanismo de constricción o inyectando veneno a través de la mordedura.
Existen una gran variedad de serpientes en todo el mundo, pero las más conocidas por su tamaño, rareza y belleza son las siguientes. La Cobra Real, La Pitón Reticulada, La Anaconda Verde, La Boa Constrictor, La Pitón Diamantina, La Cascabel Muda, La Mamba de Jameson, Pitón Amatista Australiana, Serpiente Coral Azul.
mitos y verdades sobre las serpientes, Son muchos los mitos que se han tejido sobre este bello y enigmático animal y cada país, le da una connotación y creencia particular, sin embargo, las más conocidos y populares son los siguientes:
Uno de los tantos mitos de las serpientes tiene que ver con la creencia de que la carne de víbora de cascabel sirve para sanar ciertas enfermedades, inclusive el cáncer, sin embargo, esto no ha sido demostrado científicamente.
Otra de las creencias, es que las serpientes pican usando su lengua y nada más alejado de la realidad, ya que estos animales inyectan el veneno en sus víctimas a través de sus dientes que son como finas agujas, diseñadas perfectamente para atacar a sus presas.
Hay muchas personas que afirman que las serpientes no pueden ver, sin embargo, su visión nocturna es mucho mejor que la de otros animales.
Las serpientes no atacan a los seres humanos, todo lo contrario, son criaturas que prefieren estar lejos, ya que ven al hombre como un depredador. Sólo atacan en forma defensiva cuando se sienten bajo peligro.
Por ser un reptil, se piensa que todas las serpientes ponen huevos, pero existen algunas especies que dan a luz a sus crías.
Un mito o creencia muy popular es chupar la herida cuando una persona es mordida por una serpiente, Esto puede resultar contraproducente y hasta peligroso, provocando que el veneno se expanda más rápido hacia otras zonas del cuerpo, en el caso de presentar una herida o sangramiento bucal.
Las serpientes tienen un gran valor en el equilibrio natural, ya que se encargan de controlar la proliferación de otras especies más pequeñas como por ejemplo los ratones, las ratas y muchos otros animales roedores, ayudando de esta manera a que las siembras y cosechas no se destruyan y al mismo tiempo, evita la aparición de enfermedades y plagas que pudieran afectar la salud de los seres humanos. Por otro lado, son el sustento de otras especies que habitan en la naturaleza como son algunas aves rapaces y animales depredadores como las especies felinas. Esto, sin duda alguna, permite que exista un equilibrio ecológico en nuestro planeta.
Por esta razón, es necesario cuidar y proteger a las serpientes, ya que es bastante conocido que el hombre las caza sólo para obtener lucro ya sea a través de la venta de su piel o para ser utilizada en el mundo de la gastronomía como un plato exótico, sobre todo, en los países de Asía. No obstante, sí que hay algunas serpientes con las que debemos tener especial cuidado y mucho mejor no cruzarse en su camino, porque su mordedura puede provocar lesiones graves e incluso la muerte.
Referencia: https://www.diainternacionalde.com/ficha/dia-mundial-serpiente