A finales de este año 2020 termina el Proyecto ALGARED +, financiado con más de dos millones de euros por la Unión Europea, dentro del Programa Cooperación Transfronteriza España - Portugal (POCTEP). El proyecto ha sido liderado por la Universidad de Huelva y en él han participado, además, la Universidad de Algarve, la Universidad de Córdoba, la Junta de Andalucía a través de su Centro de Investigación IFAPA El Toruño, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas a través del Instituto de Ciencias Marinas de Andalucía (ICMAN), el Centro Tecnológico de Acuicultura de Andalucía, (CTAQUA), el Instituto Portugês do Mar e da Atmosfera (IPMA) y las empresas Necton y Sea4Us.
El objetivo primordial de este proyecto ha sido el establecimiento de una colección transfronteriza (España-Portugal) de nuevas cepas microalgales, susceptibles de ser utilizadas en biotecnología (en alimentación y farmacia, principalmente). La biomasa microalgal ofrece un amplio abanico de posibilidades de uso en este campo poco explorado, y el Proyecto ALGARED + ha tratado de recoger las necesidades del sector empresarial y potenciar la transferencia de conocimientos sobre metodologías de cultivo y producción de moléculas de interés. En el ámbito de este Proyecto se han generado ya más de una quincena de publicaciones en revistas de alto índice de impacto y casi setenta comunicaciones a congresos nacionales e internacionales. Así, gracias al establecimiento de esta colección, se ha realizado un amplio estudio, sobre un número elevado de taxones, de los perfiles de aminoácidos y ácidos grasos de muchas de las especies asiladas; se han realizado estudios poblacionales fitoplanctónicos en ecosistemas extremos y se han llevado a cabo avances sobre el conocimiento relativo a la fisiología del metabolismo microalgal del nitrógeno, de los lípidos y del almidón, entre otros varios estudios. Además, una copia de la colección generada se mantendrá indefinidamente en el ICMAN, lo que propiciará sin duda futuros estudios más allá del ámbito del Proyecto.
Para los aislamientos realizados, se tomaron más de mil muestras de agua natural en más de un centenar de localizaciones de ecosistemas costeros, salinas y estuarios, tanto en España como en Portugal. Las muestras, tras una filtración inicial por un tamiz de 200 micras (para retirar, en la medida de lo posible, los consumidores primarios) fueron cultivadas en el ICMAN en condiciones estándar (20ºC, sin fotoperiodo) en medios carentes de carbono. Sobre estas muestras se llevaron a cabo aislamientos por siembra en placa de Petri, por micromanipulación, por dilución, por selección química o por fototaxis, entre otras técnicas. Las especies estuáricas y de sistemas hiperhalinos se adaptaron paulatinamente a condiciones marinas. Una vez establecidos los cultivos unialgales, se escalaron hacia cultivos de mayor volumen en el ICMAN y se centrifugaron en continuo para obtener biomasa algal que, una vez liofilizada, se transfirió a otros participantes del Proyecto para su identificación molecular, su análisis químico o para la medida de su actividad biológica. Inicialmente, se estimó que una treintena de cepas nuevas sería un número suficiente para cumplir los objetivos del proyecto. A punto de finalizarlo, el número de cepas aisladas supera el centenar.
Fuente: https://www.eldiario.es/andalucia/la-cuadratura-del-circulo/algas-marinas-alimentacion-farmacia_132_6242454.html