K30, una ganadería que ha dejado herencia en el Brahman Rojo

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* El material genético de sus sementales ha sido adquirido por otros ranchos que hoy pueden competir con cualquier ganadería en el ámbito mundial.

Constantino Cano Marí, propietario del rancho K30, dijo que esta ganadería viene de tres generaciones atrás con animales comerciales y de diversas razas, sin embargo, a partir del año 2007, ya a cargo del rancho K30, inicia con la crianza de la raza Brahman Rojo iniciando con un lote de hembras importadas de Santa Elena Ranch y con genética también del Criadero Lastra de Tabasco.

“Dentro del lote de hembras que importamos de Estados Unidos, venía una preñada y el resultado fue nuestro querido semental denominado “El Varón Rojo”, quien en el año 2012, fue el primer campeón nacional de la raza en México, poco tiempo después de la separación del Brahman Rojo, del Gris”, y fue un animal que hoy en día su descendencia sigue siendo homogénea y de mucha precocidad, que se manifiesta en los ranchos que han adquirido su genética.

Constantino Pérez reconoció que ese toro en particular, dio a conocer a su ganadería con los criadores del Brahman Rojo en México y en diversas partes de Latinoamérica, pero durante los años siguientes, vinieron otros 5 campeones de la raza, como fueron “La Catrina” en Tuxpan Veracruz; la hembra 009 en Mérida, otra hembra de número 007 en Veracruz, “Tatanca” también en Veracruz y “Bruno”, un semental que fue campeón de raza en Mérida. Además de cuatro campeonatos reservados de Raza, así como campeonatos nacionales de progenie de toro y de vaca, lo que ha sido muy satisfactorio para su empresa ganadería.

Al ser cuestionado sobre el manejo en el rancho en materia de selección, el entrevistado refirió que lo que buscan es belleza racial y productividad. “Buscamos vacas que den un becerro al año, que tengan la capacidad de criar a sus becerros con buena leche, muy dóciles y mansedumbre”, expresó.

Por lo anterior, dijo que en el rancho K30, animal que no cumpla con esos requisitos, es descartado, aunque sea muy bonito. Pero acotó que el trabajo del ganadero debe ser el proporcionar todos los requerimientos que necesitan los animales para poder producir bien o desarrollar sus potencialidades, y es ofrecerles buenas pasturas, calidad de agua, minerales, y un buen manejo de los potreros.

Tino Pérez -como muchos le conocen- sobre el manejo de potreros ejemplificó que en su rancho actualmente están aplicando el pastoreo racional que le ha permitido incrementar la carga animal por hectárea, pero además ha logrado tener en mejores condiciones los pastos, ocasionando que la raza Brahman se adapte muy bien a estas condiciones, aprovechando todos estos elementos produciendo carne y leche. Por lo anterior, puntualizó en el rancho K30 se están haciendo animales con toros racialmente expresivos y producidos allí mismo, y con las mejores vacas que cumplan los requisitos antes descritos. 

Para Constantino Pérez, la ganadería es una actividad que seguirá evolucionando por lo que recomendó a sus homólogos a actualizarse y a utilizar las nuevas tecnologías ya que pronto se le podrá decir a cada cliente las bondades y/o características que cada semental dejará en materia de genética al hato ganadero que vaya a empadrar y de esta manera también los clientes podrán saber qué toro le servirá para cada condición que quiera mejorar en su hato.

Por último, invitó a los ganaderos de todo el país y Latinoamérica, a visitar el rancho K30 donde seguramente encontrarán el animal que necesitan en su ganadería para hacerlo más rentable.

Fuente: Revista Agro Región edición No. 105.