La dentadura del caballo y su cuidado.

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¿Cómo es la dentadura del caballo?                                                         

El caballo, como buen herbívoro que es, tiene una dentadura especialmente diseñada para alimentarse de la hierba y el forraje, su principal fuente de alimentación.La dentadura del caballo cumple con la función que debe tener en cualquier animal, cortar y triturar, pero en su caso es incluso más importante porque la buena digestión ya depende de la masticación, al ser un animal especialmente sensible a este tipo de problemas. Su boca se compone por dos zonas muy diferenciadas, la parte frontal y la región molar, como veremos a continuación. Además, la parte inferior de su boca suele ser más estrecha que la superior.

¿Cuántos dientes tienen los caballos?

Normalmente, un caballo adulto tiene un total de 36 dientes. Estos dientes se distribuyen en dos partes de la boca claramente diferenciadas. Por un lado, en la parte frontal de la boca el caballo tiene 12 dientes incisivos. Por otro, en la región molar, separada de la frontal, encontramos los premolares y molares, aunque no existe diferencia en ninguno de los casos, conformando hileras de 6 piezas dentales. En el caso de los caballos macho, ya que no suele ser frecuente para las yeguas, también aparecen entre el espacio molar y la parte frontal dientes caninos. Sin embargo, estas piezas dentales no tienen función de masticación concreta.

Edad a la que salen los dientes del caballo

Otro aspecto interesante, de cara al cuidado dental de nuestro amigo, consiste en saber cuándo salen los dientes del caballo. Los dientes de leche -denominados también como dientes “deciduos”– del caballo aparecen durante los 8 primeros meses de edad. En el caso de los incisivos centrales y los premolares, pueden tenerlos ya al nacer, ¿no os parece sorprendente? A partir de los dos años y medio, los dientes de leche empiezan a sustituirse por los dientes permanentes. Este proceso suele finalizar hacia los 5 años, pero los dientes no terminan de crecer en toda su vida.

La salud dental de los caballos

Ni que decir tiene que la salud dental de los caballos es imprescindible para su mejor rendimiento, sea cual sea el que se requiera.

Una revisión al año no hace daño

Los dentistas siempre nos lo dicen y nosotros muchas veces no les hacemos caso, ¡tenemos que hacer una revisión al año como mínimo! Con nuestro caballo sucede exactamente lo mismo, conviene que un veterinario revise una o incluso dos veces al año la boca del animal para asegurarse de que no tiene molestias que le puedan afectar y, en su defecto, realizar diferentes tratamientos para paliarlo.

Problemas comunes de la dentadura de los caballos

Gracias a estas revisiones, podemos paliar diferentes problemas dentales en los caballos. Os hablamos de algunos de los problemas más comunes que pueden sufrir.

Permanencia de los dientes deciduos

En algunos casos, los dientes deciduos pueden no ser sustituidos correctamente por los dientes permanentes. Dicho de otra forma, los dientes de leche se quedan en la boca del caballo y no se caen. Como resultado, los dientes permanentes salen desviados, con los problemas que ello conlleva. Para ello, es necesario quitar el diente deciduo correspondiente, permitiendo la correcta erupción del diente permanente.

Mala alineación de la parte frontal de la boca

En el caso de que los dientes incisivos no estén correctamente alineados, tal y como sucede en las bocas “en cajón abierto” o boca “de loro”. A lo largo de los años, esta deformación puede provocar un desgaste desigual entre los incisivos superiores e inferiores,por lo que, de existir este problema, denominado como prognatismo o braquignatismo, es necesario igualarlos cada cierto tiempo.

Puntas de muelas y mala mordedura

La masticación de los caballos, característica por ir de lado a lado, y su estructura mandibular (más amplia en la superior que la inferior), puede producir diferentes problemas en las muelas. Las muelas se desgastan sólo por una lado -cara externa en la mandíbula inferior e interna en la superior-, por lo que se quedan en forma de punta, por lo que la masticación es mucho más compleja para el caballo. Más aún, en casos extremos este desgaste y el movimiento lateral al comer puede suponer que se hagan heridas en la boca. Para evitar esto, es necesario realizar un raspado que iguale los dientes molares superiores e inferiores.

Consecuencias de una mala salud dental en los caballos

Mantener una buena salud dental de nuestro caballo no es baladí, por eso os recomendamos encarecidamente la revisión pertinente por parte del veterinario. Y es que una mala salud dental puede conllevar graves consecuencias para la saluden general del animal. Por ejemplo, las molestias en la boca del animal pueden provocar trastornos alimenticios, lo cual podrás notar si ves que el caballo deja de comer parte de lo que normalmente suele ingerir. Por otro lado, la mala digestión al no poder masticar bien le puede provocar cólicos equinos. Como ya sabéis, el cólico equino es una de las enfermedades más comunes de los caballos, por lo que hay que poner remedio de inmediato. Pero no sólo eso, el dolor en la boca puede provocar estrés en el caballo. Algo tremendamente negativo porque el aumento de estrés puede reducir la fertilidad del mismo. Como veis, son muchos los problemas que pueden derivarse al no cuidar bien la boca de nuestro caballo, por lo que aseguraos de que se encuentra en perfectas condiciones.

Fuente: La dentadura del caballo y su cuidado | Equus Line