La CNOG, fortaleza del gremio ganadero: Oswaldo Cházaro

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Por Mario de los Santos

fotografías: Lourdes Ugalde /CNOG

Agro Región

En entrevista exclusiva, fuimos recibidos por el presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG), Oswaldo Cházaro Montalvo, quien nos habló sobre los orígenes de la organización, su importancia para el gremio, sus gestiones y su visión para el futuro inmediato. Aquí dejamos íntegra la plática que sostuvimos con el dirigente de este organismo a quien posteriormente asignaremos las siglas OCH y AG para Agro Región.

AG: ¿Siguen vigentes hoy en día los motivos que dieron origen a la Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas?

OCH: Fuimos concebidos por la decisión del presidente Lázaro Cárdenas del Río, en 1936. Una historia de casi noventa años de trabajo caracterizados por la afinidad con los objetivos institucionales que buscan el progreso de nuestras actividades y el bienestar de los productores. Desde nuestro origen, hemos estado motivados por la colaboración con las instituciones para impulsar el desarrollo de las actividades pecuarias en México y hoy por hoy, sigue vigente ese objetivo y motivación, no solo atendiendo temas coyunturales, sino de fondo relevantes todos para el desempeño de la ganadería.

AG: ¿Qué coincidencias tienen con el Gobierno de la República?

OCH: Coincidimos con el Sr. Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador en la necesidad del rescate del campo mexicano incorporando al desarrollo a los pequeños productores que son ciertamente la mayoría. Además, coincidimos en hacerlo de manera directa y transparente, evitando intermediarismos. Nuestra colaboración nunca ha estado condicionada a beneficios particulares o de grupo, sino por el compromiso con el desarrollo de todos los productores. 

 

AG: ¿Qué activos puede aprovechar este gobierno de la organización ganadera?

OCH: Bueno, sin duda ese espíritu, pasión, arraigo, vocación y tradición con que nos desempeñamos se sustentan en la experiencia, conocimiento técnico y profesionalización que los productores hemos acumulado, compartido, y extendido a lo largo de más de 80 años de existencia.  Ese es el activo con el que cuenta nuestra organización a lo largo y ancho del país, es con el que buscamos coordinar esfuerzos con el estado mexicano, no sólo para tener una mayor productividad, sino para que todos los productores sientan los beneficios en sus bolsillos.

AG: ¿En qué temas de fondo puede aportar su experiencia la CNOG?

OCH:

  • Trazabilidad Animal,
  • Trazabilidad Industrial,
  • Sustentabilidad,
  • Bienestar Animal

Todos estos temas se ponen a disposición para lograr mejorar la calidad de vida del productor; teniendo como eje su bienestar.

 

AG: ¿Cuáles son los retos de la actividad ganadera?

OCH: Trabajar por nuestra unidad como gremio, y para consolidar esta actividad, disminuir las brechas que aún existen entre las pequeñas y las grandes unidades de producción. La capacidad de fomentar aspectos de asociatividad, donde el pequeño ganadero encuentre cursos de capacitación, visitas de técnicos para acompañamiento, desarrollo de salas de subastas para la comercialización, posibilidades de alcance de nuevas tecnologías.

Conforme a lo señalado irrestrictamente en el marco legal que nos rige, ser coadyuvantes, promotores de políticas públicas, ser un vaso comunicante entre los productores, sin relevancia de su escala productiva, y las entidades gubernamentales.

 

AG: ¿Qué fortalezas tiene hoy el campo mexicano?

OCH: Los recursos naturales, el clima, la biodiversidad e incluso la tecnificación del sector agropecuario representan grandes fortalezas que el día de hoy colocan a México en una situación favorable para el desarrollo del sector, sin embargo, la mayor fortaleza que tiene el campo mexicano es sin duda su gente y la organización que existe entre los productores, porque la ganadería no es una ocupación, es tradición y vocación. Conocer a fondo esta actividad, es en sí mismo un activo que ayer, como hoy ponemos a disposición del estado mexicano.

 

AG: ¿Cuál es la capacidad productiva del sector?

OCH: Hoy suceden más de 7.5 millones de nacencias, mismas que se traduce en 1.2 millones de ganado en pie exportado, más de un 15% con respecto al año anterior, envío de 210,000 toneladas de producto de valor agregado al mundo.

 

AG: ¿Cuál es la situación sanitaria de la ganadería mexicana?

OCH: La salud de nuestros animales es una prioridad.

Hoy, lado a lado del Gobierno Federal y los gobiernos estatales, buscamos mecanismos de protección de nuestros hatos, donde la aparición de epizootias es de relevancia para los tres órdenes de gobierno y los productores pecuarios. Caso reciente de esta colaboración, fue donde esta confederación atestiguó la firma del Acuerdo de Entendimiento entre México y Guatemala de los Protocolos de Importación de Ganado de Guatemala.

En este sentido destacamos los beneficios de la trazabilidad para combatir el robo de ganado y para mantener el estatus sanitario que nos permite exportar. Son esfuerzos donde los ganaderos han confiado su información a favor de un ordenamiento de hatos, y donde a su vez, el estado puede con ella estar presente en los ranchos, mediante los identificadores y campañas zoosanitarias.

Estos son aspectos que hoy reconocemos más que nunca su valor y necesidad ante mercados internacionales. Por ello ha habido desarrollo en materia de mejoramiento genético, tenemos incuestionablemente aún a pesar de todos los riesgos que hay en el mundo una innegable sanidad animal que es envidiable, una ganadería fundamentalmente sana, libre de muchas enfermedades que han aquejado a las ganaderías, incluso de países que se consideran altamente desarrollados.

 

AG: ¿Cuál es la necesidad de mantener los programas de administración de riesgos?

OCH: El cambio climático ha mostrado sus efectos en el 2019, siendo apoyados por esquemas de protección a más de un 4.5 millones de Unidades Animal indemnizadas en cerca de 100 mil Unidades de Producción Pecuaria hasta octubre de este año. Sin lugar a dudas, sin la concurrencia del Gobierno Federal, estos mecanismos no hubieran alcanzado estas escalas de atención.

 

AG: ¿Qué retos tiene la ganadería con el consumidor final y con los debates públicos que muchas veces se ventilan en los medios?

OCH: Nosotros debemos tener la capacidad de engranar, los temas de bienestar animal con el impacto de la proteína de origen animal en la salud humana y el cambio climático, a partir de una información fundada en la ciencia que nos permita poder argumentar con datos que no todo lo que se dice de la ganadería es absolutamente cierto. La dinámica moderna de comunicación digital a través de redes, los chats, los celulares con una realidad que debemos saber aprovechar y eventualmente utilizar, rompiendo con la costumbre y los procedimientos tradicionales que hemos tenido en la comunicación.

 

¿Cuál es la situación de la ganadería mexicana en el marco del comercio internacional?

Con el actual gobierno de Donal Trump existen retos que pueden significar nuevas amenazas que se ciernen para la exportación de ganado en pie para Estados Unidos, que se equipara en la práctica a lo que fue el Cool en su momento, y en donde la ganadería organizada de México y me refiero a los criadores que fuimos los que estuvimos junto a la autoridad en la materia, pendientes y aportando lo necesario para que se combatiera en muchas instancias, y finalmente ante la OMC esta ley que agraviaba a los ganaderos mexicanos, así igualmente estaremos combatiendo esta nueva iniciativa que todavía sabemos tiene bastante camino pero donde invariablemente haremos lo necesario para estar presentes trabajando con nuestras contrapartes de Estados Unidos y Canadá, y desde luego también con la autoridad mexicana, con la Secretaría de Agricultura y principalmente con la Secretaria de Economía con la que ya nos reunimos y a la cual reconozco su capacidad y autoridad en la materia de negociación porque con ella nos enfrentaremos a este nuevo reto.

¿Qué cree que vaya a pasar con el presupuesto federal para programas pecuarios?

Definitivamente hay muchas inquietudes, con la interrogante de qué es lo que va a pasar con los programas de mejoramiento genético, sanidad, capacitación, transferencia de tecnología, trazabilidad, el seguro agrícola y el seguro pecuario; qué va a pasar con todo ello ante la diferencia de visión que existe hoy por hoy con respecto a la inversión pública en el sector.

Es innegable que va haber menos dinero, pero debemos de estar tranquilos que al menos ante el hecho que en el tema de salud animal en el presupuesto de egresos de la federación fue el de los menos afectados, y también debemos de tener conciencia de que se destinan algunos recursos que habremos de estar procurando tener la parte que le corresponde con justicia al sector pecuario.

Hablando de esa bolsa integral $1,370 millones de pesos para el fomento de las actividades agrícolas, ganaderas, acuícolas y pesqueras, es una bolsa importante pero también son muchas las necesidades que se generan en todo ese sector hablando de fomento.

La CNOG, como es su obligación, se ha acercado al proceso de construcción de la propuesta del proyecto de presupuesto de egresos y posteriormente al proceso legislativo con el Diputado Eduardo Ron Ramos, quien es presidente de la comisión de ganadería; que por cierto ha hecho un excelente papel en la representación, pero sobre todo en la gestión más allá de lo legislativo a favor de la ganadería mexicana.

Finalmente, estamos ante el hecho y la etapa donde se habrán de diseñar reglas de operación y definición de la aplicación de esos recursos y la localización a base también del ingenio de otros cajones donde se pudieran acomodar otras de las actividades y otras de la aplicación de recursos que tradicionalmente estaban por ejemplo en fomento o en sanidad animal, etc. 

Quiero reiterar a nuestros compañeros, a los que presiden los organismos ganaderos locales, regionales, especializados, que nos ayuden a que nuestros compañeros sepan que estamos en esa tarea. Por ello, igualmente el tema de administración de riesgos, que fue construido durante los últimos años, sobre todo, en la experiencia de los ganaderos de México, partir de la constitución de su fondo nacional basado en la existencia que ya había de los fondos estatales --principalmente en algunos estados en algunas uniones ganaderas-, a partir de la creación de nuestro fondo nacional como se fue construyendo y robusteciendo con ello un sistema nacional de seguros agropecuarios tanto privados como públicos.  Aquí tendrá que venir una redefinición de ¿cuánto va a ver?, ¿qué se va a apoyar’ ¿cómo lo vamos a afrontar los productores?, pero igualmente estamos trabajando en ello.

Esta es una de las prioridades que le hemos planteado al Poder Ejecutivo, que tiene en sus manos el diseño de las reglas de operación y la aplicación de los recursos, pero todavía en este tema del seguro, que se explicara por lo menos uno de los seguros más importantes que ha ejercido el Fondo de Aseguramiento Nacional, que es el SECA, el hecho de que se comprenda que los alcances de este seguro fueron diseñados de manera muy diferente a los de otros que igualmente operaban en alguna época y ante contingencias climatológicas y particularmente por sequía.  No podemos exigirle a un seguro que responda de manera diferente a como fue diseñado y sobre todo como está reglamentado, pero insisto en señalar que, se ha hecho de manera responsable y correcta, y que no permitamos que también que se ensañen con un modelo que funcionó durante muchos años de manera muy positiva.