¿CUÁNTO DURA LA GESTACIÓN DE UNA PERRA?
La Gestación de una perra dura un promedio de 9 semanas, unas 4 veces menos que en la especie humana. De todos modos, puede haber gestaciones un poco más cortas o más largas. El parto puede adelantarse un poco si la perra trae una camada muy numerosa.
El diagnóstico de la Gestación, a diferencia de lo que sucede con otras especies, no suele realizarse mediante tests rápidos puesto que todas las perras darían positivo, debido a los ciclos hormonales normales en el celo.
Lo cierto es que durante el embarazo de un perro se observan algunos síntomas evidentes que indicarán que el proceso de gestación se ha iniciado.
Los síntomas de una perra embarazada son:
*Ciclo: generalmente las perras suelen experimentar el celo dos veces al año, que suele variar entre 4 y 13 meses, no obstante, este no es un indicador fiable, ya que los cambios hormonales pueden alterarlo enormemente. Será muy recomendable prestar atención a otros síntomas.
*Vientre abultado: alrededor de los 30 días de gestación, nuestro veterinario, mediante un examen físico, podrá realizar la palpación del útero que podrá confirmar el estado de preñez.
*Estado de los pezones: se trata probablemente del síntoma más evidente de preñez, ya que durante el embarazo los pezones de la perra aumentan su tamaño y se tornan de un color más intenso.
*Flujo vaginal: los cambios en el flujo vaginal de la perra embarazada también son frecuentes. Podremos observar descargas vaginales blancas o transparentes, nunca con sangre, negras o verdes.
*Comportamiento: el comportamiento es un indicador poco fiable para confirmar el embarazo de la perra, pero se trata de un aspecto que no podemos pasar por alto. Puede ocurrir que se muestre anormalmente activa o, por el contrario, mucho más apática. Es habitual que rechace el contacto con otros perros, especialmente machos, y que su actitud hacia nosotros se vuelva más afectuosa o más arisca. También se produce la búsqueda del "nido", es entonces cuando la perra busca lugares sombríos y cómodos para refugiarse y tener allí su camada.
*Vómitos: alrededor de los 35 días de gestación, cuando se produce el giro y repliegue del útero, la perra puede experimentar ciertas molestas que incluyan vómitos.
CUIDADOS DE UNA PERRA EMBARAZADA
Las perras gestantes necesitan atención y cuidados constantes por parte de sus tutores, principalmente relacionados con la alimentación y el confort. Siempre es aconsejable acudir al veterinario para que nos guíe durante este proceso, ya que cada embarazo es único y cada progenitora puede necesitar ciertas atenciones particulares que aseguren el buen estado de salud y el adecuado desarrollo de los fetos.
PARTO
Una vez llegados a la semana 9, existen varios métodos para predecir el momento del parto. El más sencillo, y que puede realizarse en casa fácilmente, es medir la temperatura rectal de la perra a intervalos regulares, por ejemplo, cada 12 horas. Así sabrás cuál es la temperatura normal de tu perra a lo largo del día. La mayoría de las perras experimentan una bajada de la temperatura corporal de un grado centígrado aproximadamente, 24 horas antes del parto. Si has hecho un buen seguimiento, podrás predecir el parto en las siguientes 12-24 horas.
CAMBIOS EN LA ALIMENTACIÓN
El crecimiento más marcado de los fetos se produce en las 3 últimas semanas de la Gestación. No suele ser necesario realizar cambios en la alimentación de las perras durante las primeras 6 semanas. Sin embargo, cuando se entra en el último tercio de la Gestación, será importante que aumentes el contenido de energía mediante la alimentación para hacer frente a este crecimiento considerable de los fetos, y aumentar también el contenido de calcio para que los fetos puedan empezar a formar sus huesos de forma adecuada.
Lo más recomendable y sencillo es empezar una transición al alimento que vas a emplear para los cachorros a partir de la semana 6 o 7. Elije uno de alta calidad, cuya composición y contenido en energía y calcio sea adecuado para el tamaño de la raza de la madre y los cachorros, y comienza a dárselo de forma gradual a la madre, para que pueda afrontar esta etapa de mayor demanda de nutrientes. Además, este alimento también te servirá en el futuro para que la madre pueda hacer frente a la lactación, otra de las etapas que genera más demanda de nutrientes debido a la producción de una leche nutritiva para los cachorros.
En cualquier caso, recuerda que será muy recomendable visitar el veterinario para realizar una ecografía y saber cuántos cachorros están por venir, así como conocer algunas recomendaciones especiales que pueda prescribirnos nuestro veterinario tras la observación del caso concreto.
En la fase final del embarazo, la perra cada vez posee menos espacio en su organismo para albergar la comida. Puede ser interesante ofrecerle una menor cantidad de alimento, pero aumentar el número de tomas, reponiéndolo de forma constante para que siga alimentándose, no obstante, es muy común que la perra embarazada deje de comer en los días previos al parto.
FUENTES:
El embarazo de la perra semana a semana - Guía completa (expertoanimal.com)