LA IMPORTANCIA DEL DESCANSO DE LA VACA

img

Las vacas lecheras deben descansar durante aproximadamente 10-12 h al día y la conducta de descanso es incluso más importante para las vacas que la conducta de alimentación y la interacción con otras vacas. El tiempo que las vacas dedican al descanso es importante, ya que la reducción del tiempo que permanecen echadas puede afectar tanto a la producción como al bienestar. Cuando está echada, una vaca optimiza la rumia y produce más saliva, reduciendo así el riesgo de acidosis ruminal. Asimismo, el aporte de sangre a la ubre es mayor en una vaca echada  (alrededor de 5 L / min) que en una vaca de pie  (alrededor de 3L / min); esto mejora la función de la ubre y aumenta la producción de leche. Cuando una vaca está demasiado tiempo de pie, la presión dentro de la cápsula de la pezuña aumenta y esto produce hipoxia (reducción del suministro de oxígeno) e isquemia (flujo sanguíneo restringido) aumentando el riesgo de cojeras. Por otra parte, la competencia por un lugar cómodo para descansar puede desencadenar conflictos entre las vacas, lo que a su vez puede causar estrés crónico y aumentar el riesgo de  enfermedades y problemas reproductivos.

 Se  utilizan varios indicadores de comportamiento para evaluar el confort de las vacas, incluyendo el tiempo total que permanecen echadas,  la frecuencia con que se echan y la duración de cada episodio de descanso. Cuando las vacas están cómodas, el tiempo total de descanso aumenta y además cada episodio de descanso dura menos tiempo,  ya que las vacas prefieren levantarse y echarse más a menudo. Por el contrario, cuando las vacas no están cómodas, prefieren permanecer de pie en lugar de experimentar  el dolor asociado con el hecho de echarse/levantarse sobre superficies inadecuadas. Además, en estos casos también aumenta el número de vacas echadas parcial o totalmente fuera de la zona de descanso (por ejemplo, en el pasillo). Finalmente, en explotaciones con  cubículos inadecuados aumenta el número de vacas que realizan la conducta denominada "perching", que consiste en que la vaca tiene las dos patas delanteras en el cubículo y las dos traseras  en el pasillo. 

EL SUEÑO

Las vacas adultas duermen durante aproximadamente 4 horas al día, sobre todo durante la noche. El sueño, especialmente el sueño REM ( del inglés "rapid eye movement"), ocurre con mayor frecuencia cuando la vaca está descansando con el cuello relajado y la cabeza apoyada en su flanco. Cuando las vacas están correctamente adaptadas a su entorno duermen raras veces de pie. Una disminución del tiempo total de descanso debido a malas condiciones de alojamiento afectará el sueño y, a su vez, la falta de sueño puede alterar el sistema endocrino, aumentar el gasto energético y perjudicar la función inmune

Fuente : https://www.fawec.org/es/documentos-tecnicos-vacuno/194-descanso-eficiencia-productiva-vacas